También nos llaman guerreros de la luz, yo estoy en contra de tener etiqueta, pero hay veces que es necesario para distinguir las cosas, pero las menos posibles. Somos todos iguales, somos uno, no hay diferencias, solo las que queréis ver y tener.
Desde que tengo uso de razón jamás he comprendido que por ser de derechas es más que de izquierdas o al revés, o si eres revolucionario es más que si eres anarquista o al revés, así miles de etiquetas como yo lo llamo. Estas etiquetas crean odio, venganza y muerte, yo jamás he permitido que me las pongan y menos ponérmelas yo. No pertenezco absolutamente a nadie ni a nada, solo a mí misma, libre como el viento, cuando alguien necesita ayuda ahí estoy, me da igual si es de derechas o izquierdas, raza, cultura o religión.
Entonces ¿por qué lucháis entre vosotros?, el problema son ellos, quitaros la etiqueta, ser libres y luchad unidos, ser uno en un millón, así no podrán con vosotros. Luchad por un sueldo digno, que todos cobren lo mismo, ¿por ser rey o político o banquero, entre otros, tienen que ganar más de 300.000 mil euros al mes y tú no ganas ni 1.000? No es justo ni razonable, ellos no son más que tú ni menos, somos iguales, pues que ganen lo mismo.
LA RIQUEZA DEL VATICANO
En el amor universal todo somos iguales, somos uno, volad libres por la
paz y la justicia, somos uno, sin etiquetas, esto crea odio y muchas vece
muerte divide y venceras. Nuestro poder es la unión, despertad y romped
vuestras cadenas de esclavos, que nadie os diga qué comer, qué vestir, qué
hacer, sois libres, romped las cadenas que vosotros os habéis puesto por miedo
y… ¿miedo de qué?
Jamás he comprendido bajo el terror y el miedo que vive el mundo, miedo de
perder el trabajo, miedo del qué dirán y mil cosas más. Yo cuando trabajaba y
había veces que estaba muy enferma, jamás he permitido ser su criada y menos
ser esclava, me revelaba, prefería dormir en la calle que ser su esclava. Jamás
he tratado a la gente de diferente manera por ser ricos, los he tratado como trataría
a un mendigo, por ser ricos no son más que yo y un mendigo por no tener es
menos, son iguales que yo. Recuerdo una vez en una ONG, había una fiesta y
estábamos pocos voluntarios y había mucho trabajo y el presidente y otra gente
como él estaban sin hacer nada. Les llamé la atención y los puse a trabajar con
nosotros, la jefa casi me mata, que cómo había puesto a trabajar al presidente
y a los invitados especiales, ¿qué tienen ellos que no tenga yo?, una etiqueta,
un gran sueldo a mi costa.
Luego fue muy divertido verlos limpiar y trabajar con nosotras, sois
vosotros los que les dais el poder y los hacéis dioses que no existen, sea
quien sea no son más que vosotros ni menos. He conocido a gente famosa, jamás
le he pedido un autógrafo ni tengo fotos con ellos y si viera a los reyes haría
igual.
Sois vosotros los que se lo permitís todo, porque son más que vosotros
tienen que ganar mil veces más, porque son más que vosotros tienen que vivir en
palacios, porque son más que vosotros lo tienen todo. Despierta ya y ve la
realidad, no hay nadie más que tú ni menos, somos uno y quitaros las etiquetas
de odio, poder de insolidaridad, venganza, ser vosotros mismos y libres.
La mayoría de la gente no acepta que yo no tengo absolutamente a nadie,
porque todos necesitan un Ángel, un Dios, una Vírgen, un famoso, un político,
un futbolista y mil cosas más para ser algo y vivir, yo jamás he necesitado
nada de esto, me tengo a mí misma, al universo y la tierra, aquí entra todo por
igual: plantas, animales y seres humanos, sin etiquetas, raza, cultura o
religión, entre otras cosas. Todos tienen un sitio en mi corazón, ya sean
buenos o malos, somos uno.
Cuando veáis así el mundo podréis alcanzar la paz interior y la felicidad
verdadera, no está en comprar un coche o un vestido de moda, ser más que tu
vecino por tener una etiqueta más grande, aquí no está la verdadera paz y el
amor universal que tanto necesita el mundo.
No busquéis fuera lo que tenéis dentro de vuestro
corazón, absolutamente nada os va a dar la paz y felicidad verdadera porque
está dentro de vosotros, en el amor universal, no está en un coche nuevo o un
vestido de marca hecho por niños y gente esclava que mueren día a día de una
manera terrible, cruel e inhumana. Os dará felicidad pero ¿cuánto
os dura?
VUELA ALTO, ALTO... MIENTRAS MÁS ALTO MEJOR
La libertad exige que volemos alto y
que estemos dispuestos a pagar el precio de no hacerle caso a quienes nos
critica y secretamente nos envidian.
Este es un gran escrito, así somos
los guerreros de la luz, esta es nuestra vida, pero hasta que llegas aquí hay
un camino muy largo y duro, pero merece la pena seguir y luchar por nosotros y
el mundo para que un día sea paz y amor universal, no en el infierno que lo han
convertido esos dioses de oscuridad, tenemos que encender la luz del amor
universal.
SOMOS GUEREROS DE LA LUZ, DE LA PAZ Y EL AMOR.
Los Guerreros de Luz y sus
Dificultades.
La paz es nuestro destino y no hay
nada más grande que sentirla en tu camino.
Con todo mi sentimiento, en un
momento de dejar partir el dolor y de dar entrada al amor, dejo atrás los
clavos y me agarro a la luz del sol. Hoy empieza un nuevo día, en que en la
cima de la montaña gozo de las vistas y abrazo el camino recorrido. Y me
dispongo a continuar, todavía hay que andar más y llegar más arriba. Y acepto
lo que venga, aunque puede que por el camino no me guste lo que me toque vivir
y hacer, y además pueda equivocarme, sé que al final servirá para llegar a mi
destino. La luz es para compartirla y expandirla, y eso es nuestro cometido
Los Guerreros de Luz y sus Dificultades
Te preguntas que haces aquí, en este
mundo en medio de toda esta gente. No entiendes tanta maldad, tanta locura
ciega y no soportas tanta injusticia. Desde pequeño nunca has encajado y has
pensado que tú eras el raro. Los golpes te han lesionado y tantas dificultades
hacen que huyas mentalmente hacia el mundo que anhelas. En el fondo es como si
fueras de otro planeta y estuvieras aquí sin haber conseguido aterrizar
completamente.
Un buen día despiertas, empiezas a
entender las cosas y a encajar las piezas del puzzle. Resulta que no eres tan
raro, y que tu mundo imaginario es mucho más real de lo que creías.
La conciencia duele, parece más fácil
vivir sin ver, aunque al final tenga consecuencias. No soportas las respuestas
oscuras programadas por la hipnosis masiva, y el hecho de que no se den cuenta
de lo que para ti es evidente. No soportas esa ignorancia y esa maldad; y
tampoco esas conversaciones banales. ¿Por qué tú sabes medir la injusticia y
otros no? ¿Por qué no se dan cuenta de cuál es la causa de sus enfermedades?
¿Por qué no se dan cuenta del motivo de sus accidentes?
Pero luego resulta que conoces más
personas que son como tú, del estilo, y aun duele más. Duele por qué ves
también el mal, o la ignorancia ingenua, en los que deberían abrir el camino
igual que debes hacer tu mismo. Y también duele por qué te das cuenta de que no
sabes nada, y de cuantas limitaciones y programación mental llevas implantada.
Y además, resulta que tú tampoco eres tan bueno como creías. Y no ves tan bien
como crees, aunque veas diferente a la mayoría.
Aquí empieza la gran prueba de fe y
humildad. ¿Estás dispuesto a limpiarte? ¿A reconocer que aunque sabes cosas en
realidad no sabes? ¿Te atreverás a jugar el rol que te corresponde? ¿Te
atreverás a destacar por encima del rebaño? ¿Aceptarás las pruebas y “putadas”
(en realidad la formación “técnica”) de tu camino? ¿Podrás estar años apostando
en lo que crees y sientes? ¿Aprenderás a distinguir entre luz y oscuridad?
¿Esquivarás las redes de los falsos profetas? ¿Serás capaz de reconocer tu
oscuridad, aceptarla y cambiar lo que tengas que cambiar? ¿Aceptarás la
realidad tal y como es, sin inventártela según tu interés? ¿Confiarás en las
señales? ¿Tendrás suficiente paciencia y fe? ¿Podrás mantener el corazón
abierto cuando recibas ataques de la oscuridad? ¿Podrás mantener la fe y el
amor? ¿Evitarás ser uno de los caídos cambiados de bando? ¿Tendrás la humildad
de ser consciente de ser simplemente un canal? ¿Sabrás reconocer y valorar en
los demás seres terrenales sus grandes virtudes? ¿Cuándo seas golpeado
fuertemente serás capaz de no renegar de la luz? ¿Estarás dispuesto a ir a por
todas, pase lo que pase, con las consecuencias que tenga? ¿Sabrás entender
verdaderamente los mensajes, trasladarlos y adaptarlos a la realidad terrestre?
¿Superarás tus propias limitaciones personales yendo más allá?
El camino de luz no tiene recompensas
“rápidas”, no eres aplaudido por la gran masa, debes nadar contra muchas
opiniones y influencias, y la soledad de no ser entendido puede dolerte mucho.
Cada uno tiene su nivel, y su pacto, y no todos lo tienen tan difícil como
otros; incluso hay quien lo tiene fácil. La conciencia duele y la desesperación
puede aparecer; pero ahí está la fe y la paciencia, y hacer las cosas bien, con
los pies en el suelo.
Es mucha la intoxicación y la
distracción que se recibe. Salir de ahí y ser un guerrero de luz consciente,
con todo su potencial despierto y desarrollado es nuestra gran prueba de fe, de
humildad y de amor, a nosotros mismos y a los demás.
Hasta ahora todo era preparación y
experimentación, pero ahora esto ya va realmente en serio. No conocemos el
futuro, pero sí el presente, y es en este en el que debemos trabajar y sembrar.
Son esos grandes momentos de gozo y
alegría, esas grandes conexiones y regalos recibidos, y esa sincronicidad lo
que te va demostrando que estás siguiendo el camino; y lo que te mantiene vivo,
activo y con fe.
Esto no es el jardín “happy flower”
que deseamos, es más crudo de lo que habíamos imaginado, pero es lo que es, y
cuando antes lo aceptemos mejor. No es necesaria la destrucción para una
regeneración y renacimiento, con transformación consciente es más que
suficiente.
Con todo mi sentimiento, en un
momento de dejar partir el dolor y de dar entrada al amor, dejo atrás los clavos
y me agarro a la luz del sol. Hoy empieza un nuevo día, en que en la cima de la
montaña gozo de las vistas y abrazo el camino recorrido. Y me dispongo a
continuar, todavía hay que andar más y llegar más arriba. Y acepto lo que
venga, aunque puede que por el camino no me guste lo que me toque vivir y
hacer, y además pueda equivocarme, sé que al final servirá para llegar a mi
destino. La luz es para compartirla y expandirla, y eso es nuestro cometido. La
paz es nuestro destino, y no hay nada más grande que sentirla en tu camino. Por
eso hoy empieza un nuevo día, nada volverá a ser igual, hasta el fin de mi
camino, asumo el poder y la gracia, y acepto mi destino.
Escrito por Carles Gallego en un
momento de paz y gracia divina! Inspirado por aquel que se me revela de vez en
cuando, aunque siempre esté ahí, y que va abriéndome sus puertas a medida que
avanzo.